Aunque el cielo no puede ser conocido plenamente a través de la mente humana e impone su presencia excesiva y sublime, los humanos elaboran un modelo verbal, iconográfico y matemático cada vez más detallado del cosmos en el que viven. De esta manera, la comprensión ampliada de la astronomía, la astrofísica y la cosmología es fundamental para ver mejor el mundo y situar al ser humano en él, incluso en la medida más pequeña que sea importante en la conciencia. Es más: el modelo actual del universo constituye una verdadera cosmovisión que no sólo amplía la apariencia del mundo, sino que también mejora y refina el soporte mismo de ese conocimiento. Este medio es una conciencia avanzada que depende de las operaciones del cerebro en relación con su entorno infinito a través de la percepción y la habilidad, la imaginación y el razonamiento, la intuición, la metáfora o la admiración. Desde este punto de vista, se explican como tareas de importancia evolutiva la contemplación y tratamiento de los misterios y maravillas que la investigación del universo percibe en su progreso.

Este texto examina el surgimiento de la conciencia y los conocimientos que este conocimiento requiere e impone, y se fundamenta en el funcionamiento del cerebro, así como en el intracosmos fascinante y difícil de descifrar del propio universo sideral. La conciencia cosmológica es entonces una mentalidad expandida que requiere una contemplación ancestral del cielo estrellado, aumentada hoy con las herramientas, tareas y teorías de la astronomía. El ensayo señala y aborda algunos elementos de esta cosmología cognitiva, que, con los componentes filosóficos necesarios, estarían anidadas entre la neurociencia cognitiva y las disciplinas que definen la cosmología actual, sin descuidar las expresiones literarias y artísticas que también hacen referencia a la condición humana. el cosmos

Biografía del autor

José Luis Díaz (México, 1943) se graduó como médico cirujano en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en 1967 y allí inició su carrera académica como investigador de tiempo completo. Es investigador del Departamento de Historia y Filosofía de la Medicina de la Facultad de Medicina de la UNAM. Su área de interés es la Psicobiología, las bases biológicas y cerebrales de la inteligencia y la conducta. Sus estudios han incluido neuroquímica, psicofarmacología, etnofarmacología, etología, el problema mente-cuerpo, conciencia, ciencia cognitiva y epistemología.